martes, 8 de septiembre de 2009

Modelo Participativo contra Modelo Representativo en Alhaurin de la Torre.


Cuesta comprender a algunos, el autentico sentido de una propuesta política independiente y participativa a nivel local.
Hagamos un breve ejercicio de didáctica:
Como alguien dijo alguna vez “la democracia es la menos mala de las formas de gobierno conocidas”, pero sin embargo tal como la conocemos, resulta más o menos imperfecta, o al menos podría decirse que sufre algunas patologías.
El sistema político en el que vivimos es eminentemente representativo, es decir, los ciudadanos delegamos el poder de decidir a los políticos que libremente elegimos cada 4 años, y prácticamente no volvemos a participar en la gestión ni toma de decisiones durante ese periodo. Eso nos convierte en la práctica en meros espectadores de las actuaciones de los políticos, sin posibilidad de intervenir en el funcionamiento de las instituciones de forma directa, y colocándonos en posición de “administrados” por aquellos a los que hemos confiado que nos representen.
Los partidos políticos tradicionales, están fundamentados en este sistema político y funcionan aprovechando esa inexistente participación de los ciudadanos a excepción del día de las elecciones. En ese sentido, demasiadas veces observamos como las denominaciones, derecha, izquierda o centro pierden su significado y se usan principalmente para argumentar discursos demagógicos o lanzar insultos al adversario.
En nuestro municipio, se cumple exactamente esta realidad. La participación ciudadana se reduce en la mayor parte de los casos a la consulta electoral, y la mayoría de los políticos profesionales que nos gobiernan, incluso alguno de los que pretenden hacerlo, se escudan tras unas siglas políticas que poco o nada tienen que ver con sus auténticos intereses, con sus actuaciones ni con nuestro pueblo.
Una propuesta política participativa e independiente de los partidos políticos nacionales adquiere su pleno sentido a nivel local, porque pretende aportar el principal ingrediente que le falta a nuestro ayuntamiento: la participación ciudadana.
Una propuesta que consista en ofrecer al ciudadano la posibilidad de participar de forma efectiva y permanente en las decisiones que le afectan durante todo el mandato electoral, a través de su intervención directa, individual o en colectivos de mayorías o minorías, en el propio seno de su ayuntamiento.
Participación en la toma de decisiones, mediante consultas permanentes, y mediante la creación de espacios donde se permita la participación e intervención directa de los vecinos.
Participación en la ejecución y control de esas decisiones a través de las diferentes formas de organización ciudadana como comisiones o asociaciones de vecinos.
Y Participación en los beneficios que se deriven de esas actuaciones, en forma de mejoras de servicios, equipamientos o recursos que finalmente repercuten en los ciudadanos que realmente los necesitan.
No se trata de estar permanentemente realizando consultas ciudadanas, o referéndums, sino de organizar mecanismos con los que se pueda conocer los auténticos intereses de los vecinos, que en demasiadas ocasiones están alejados de los grandes proyectos y planes de futuro de los políticos.
Y eso en la práctica se puede hacer de forma tan simple como estableciendo “plenos participativos” previos a los oficiales con los representantes de las asociaciones vecinales, colectivos y vecinos individuales, para conocer y atender las demandas directas de los vecinos, y creando medios y canales efectivos donde se puedan presentar propuestas o demandas ciudadanas que sean directamente canalizadas a quien corresponda tramitarlas.
Se trata de aprovechar la experiencia y capacidad de TODOS para plantear y solucionar los problemas cotidianos, de una forma más legitima y con el único objetivo de mejorar la calidad de vida de los vecinos.
Se trata de no confiar en los políticos todas las decisiones que nos afectan durante cuatro años, porque en muchos casos pueden adoptarlas bajo la influencia de intereses alejados a los ciudadanos, o impuestos por políticas de partidos nacionales.
Se trata en resumen de fomentar la participación de TODOS y no separar la sociedad civil de la política. Eso es principalmente lo que los actuales políticos profesionales temen, y estoy convencido de que se puede conseguir si desde el principio los vecinos ven como suyo el proyecto de un partido político independiente y participativo.
Merece la pena intentarlo.

Juan Manuel Mancebo Fuertes
Septiembre 2mil9
www.electoresalhaurin.blogspot.com
www.bobastro2.blogspot.com